Recuerdo a un tipo que visitaba el estudio de locución donde, hace algunos años, hacía radio en directo. Se sentaba en silencio y apuntaba escrupulosamente las canciones que sonaban en mi turno. Era el recaudador de la SGAE. Un Scrooge de las notas musicales.
Resulta divertido saber que Teddy Bautista interpretó a Judas en Jesucristo Superstar; también que una de sus pocas composiciones de éxito se titula Get on your knees, que es, precisamente, como muchos han querido ver a este capo y a sus secuaces que se llevan el cash fresco al más puro estilo Corleone ¿Estaba escrito su destino? Teddy, finalmente, tras 34 años al frente de la SGAE, ha dicho adiós y ha hecho honor a su canción: se ha puesto de rodillas (más bien le han dado un puntapié en el culo, no le quedaba otra que irse, por vergüenza torera)
Conozco a autores de éxito que observan como los dineros que perciben de la SGAE han menguado a pasos agigantados. A responsables de emisoras de radio y televisión que han pagado por redifusión de contenidos con cheques al portador que nadie sabe donde han terminado. A creadores de eventos culturales que cuentan como, al cierre de taquillas, un señor de esta logia se lleva el porcentaje de cash estipulado y vuela con la pasta como una bruja en su escoba.
Imagino que tanto circulante ha dado para crear la sociedades Microgénesis y que en un año cosechó 4 millones de euros. Ese es el dinero que no llega a los autores, que nos cobran por ser presuntos piratas, que se les exige a los dueños de los salones de banquetes y hasta los pobres grupos de BBCV (Bodas, Bautizos, Comuniones y Verbenas)
Si en todos los países del mundo existen este tipo de impuestos ¿Por qué la SGAE tiene tan mala fama en el nuestro? Desconozco el derecho internacional en esta materia pero sospecho que las formas son muy distintas.
Si la actual Sociedad de Autores está podrida, y todo parece indicar que lo está, pues nada, borrón y cuenta nueva. Pero de verdad. Eso todavía está por ver.
Quizá, lo que sucede en la sede del Palacio Longoria sea el reflejo de nuestra sociedad. Y si todo está podrido, ñoras, ñores, matemos al apuntador o a todos los Judas que nos han vendido por un plato de lentejas.
2 comentarios:
El problema español con respecto a la SGAE no es la propia SGAE sino lo que ha hecho posible que exista semejante bodrio recaudador privado.
Deberíamos preguntarnos, no dónde han ido esos cuatro millones sino los cientos que ha recaudado y que nadie sabe dónde están.
En realidad esos mamotretos se montan para financiar otras cosas, el problema deviene cuando los administradores, hombres de paja, ven tanta pasta arriba y abajo y deciden que ellos también quieren su parte. Más o menos como el Millet, Convergencia y el Palau.
Por cierto... alguien sabe algo de Millet.
Yo sí. Toma café periódicamente con Artur Mas.
El problema no es Urdagarin,Teddy Bautista, sino la gran cantidad de ladrones, que hay.
Sobre Millet dire que repartió mucho dinero. Supongo, que por orden de Artur Mas.
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