lunes, junio 19, 2006

MADONNA, AHORA, EN MALLAS

Veo a Madonna en una foto imposible de acróbata “Circo del sol”. La tipa roza los cincuenta, ha parido a dos niños y tiene una silueta que ya hubiese querido para sí a los veintitantos. Madonna era graciosa cuando aquello del “Holiday” pero hoy me parece, sencillamente, abrumadora. Todavía estoy patitiesa tras ver a esa estrella de showbussines, haciendo una ashana de yoga. En mis tiempos de cole, la que hacía eso era una campeona. Lo llamábamos hacer el puente, que no es lo mismo que el pino-puente (esos eran territorios acotados a las superágiles, no a las patitas gordas como servidora). Madonna es una superviviente, una maga del reinventarse. En su nueva gira “Confessions on a dance floor” la vemos emulando a las locas de las pistas de baile. No en balde, siempre se ha confesado una fan de la figura de Tony Manero. Ya saben, el chulito de pantalones blancos ajustados que salía en “Saturday nigth fever”. Madonna Louise Verónica Ciccone Fortín no para de inventarse un nuevo personaje cada año, o cada dos, a lo sumo. Cambia de piel más que una culebra. Es casi una transformer. Consigue llevar sin empacho aquel corsé que le fabricase Jean Paul Gaultier y publicar un libro de fotografías muy artísticas titulado “Sex”.

Un lustro más tarde, más o menos, aparecía en la portada del “Hola” como una amantísima rubia y virginal mamá. Yo me la creí. Incluso llegué a sospechar que “super M” había sentado cabeza. Pero no. Al poco va y aparece morena oriental y vestida de china. Luego se dejó melenón y se disfrazó de Morgana para cantar aquello de “Frozen” en el álbum “Ray of light”.
La ambición rubia ha sido Evita, rostro de “Max factor”, compinche de Dick Tracy, chica “Bomb” (“Die another day”). Se ha puesto la boina del Che Guevara en la portada de “American Life”, la de Cowboy en “Music”; se vistió de ranchera para promocionar uno de sus primeros sencillos-discos “You can dance”; la hemos visto de Marilyn en "Material Girl", de Maria Antonieta... Incluso triunfó antes de que nadie le pusiera rostro, puesto que su primer sencillo, titulado “Everybody”, se lanzó sin foto y vendió 80.000 copias en Estados Unidos. La gente se llegó a pensar que era negra.

No hablemos de premios. Ya los tiene todos, incluso un Globo de Oro por “Evita” y algún Óscar por una banda sonora.
Ha cantado aquello de “Vogue”, con ese baile de manos increíble. Ha protagonizado vídeos violentos, se ha morreado con Britney Spears (seguro que fue idea de ella, of course) se ha magreado con Antonio Banderas en “In the bed with Madonna”, ha bailado en una limousine, encima de una mesa de juegos y vestida de cueros dorados cantando aquello buenísimo de “Music”; ha escrito cuentos para niños y en sus comienzos trabajó en un Dunkin Donuts y en un Burger King. ¿Alguien da más?

Capítulo aparte merece su dedicación a la Cábala Hebrea, de la que se ha esgrimido como exponente internacional, ante la rasgada de vestiduras de los ortodoxos, y su prédica continua de la dieta macrobiótica y del yoga.

Madonna se reinventa, sí. Ella en sí es una gran empresa que genera sustanciosos dividendos. Quizá algunos piensen que ha conseguido todo en la vida, algunos envidiosos incluso maldecirán que demasiado. Yo opino que Madonna es un fenómeno casi milagroso para alguien que llegó a Nueva York, con 35 dólares en el bolsillo, y que pidió al taxista que “la llevara al centro de todo”.

1 comentario:

Unknown dijo...

Creo que vas con un retraso de un par de años...

La ultima gira de Madonna (la actual) se llama Confessions On a Dance Floor.

Su anterior fue en 2004 y se llamó Re-Invention Tour (no re-inventation)

aquello de 'caliente xxx' no era un calendario, era su libro de fotografias 'Sex'.

Die another day era una peli de James Bond, y sólo aparecía en un simple cameo, la 'chica Bond' de la peli era Halle Berry.

La boina del Che la llevaba en la portada del disco de 'American Life', no American Pie (eso fue la cancion que versionó y se incluyó en el disco 'Music')

Siento ser tan crítico, pero ya que hablamos de La Reina, hablemos correctamente.
Gracias.