viernes, diciembre 17, 2010

Aprendiz de todo



Entiendo la crisis de los 40. Uno siente que ha pasado mucho tiempo y que sigue casi igual que siempre. Personalmente, he ido, he vuelto. He hecho de todo: cubrir espectáculos y ruedas de prensa con mi bici, mi grabadora y mi cámara de fotos. Entrevistar a gente maravillosa en camerinos imposibles; ser asesora de todo un señor consejero y decidir que odio la política aunque no a los políticos. Porque hay gente estupenda y luchadora y trabajadora. He sido la eterna becaria en todos sitios y nunca he coronado la cima. Y nunca he sabido porqué pero no tengo ninguna sensación de frustración. Entre cientos de puertas cerradas siempre se ha abierto alguna ventana. Entre jefes que no me han querido me he encontrado con personas de gran talento y prestigio que me han aupado. Y entre cientos de proyectos fallidos, alguno salió bien y como cantaba la Streisand Here I'm.
Pero sobre todo, a mis 40, he conocido personas absolutamente deliciosas y maravillosas. Amigos fieles. Los fantásticos colaboradores del Black Coffee y gente que te ofrece su mano justo cuando crees que te vas al pozo. Entre las personas de las que siempre esperé algo y nunca obtuve nada he encontrado gente a la que no le pido nada y me da todo. Entre la gente que me hace perder el tiempo he encontrado gestores culturales que han apostado por mi una vez y otra y otra, hasta cinco, que cinco años cumple "Escritores en su tinta". Y no, no he tenido un puto padrino en toda mi vida pero he tenido, y tengo, tanto cariño, tanto apoyo de mis compañeros y tanta gente de la que aprender, que ahora ya no hay quien me tumbe.
Harta de que me coman, hoy me pienso zampar el mundo. Y poquito a poco, sin prisa, con la sonrisa de un niño, con el encanto de un hombre bueno a mi lado Here I'm. En medio de ninguna parte. Viajera a donde el camino me lleve. Sin miedo. Y a los que me han negado el pan y la sal....y me lo siguen negando, lo siento por ellos, porque voy a seguir trabajando duro y no voy a perder ni un segundo en lamentarme. Esos seres oscuros son cosa del pasado. Gracias a todos: amigos de Vivir en el filo, del facebook, mi querida familia, mis AMIGAS, fabulosas todas, generosas y desprendidas. Gracias porque es vuestro soplo el que me mantiene en pie como si fuese una vela que necesita el viento para inflarse. Vosotros sois el viento.

6 comentarios:

Más claro, agua dijo...

¡Los 40 principales!

¡FELIZ AÑO NUEVO!

Besos grandes!!!

Antonio Rentero dijo...

Precioso eso del viento... muchísimas felicidades en tu llegada al cuarentorrismo y muchas gracias por ser cómo eres.

Besicos.

Anónimo dijo...

Feliz cumpleaños! No olvides nunca la suerte que tienes porque has conseguido muchas cosas importantes en esta vida.Has escrito un libro, has tenido un hijo, y lo del árbol ya lo has plantado?, ja,ja. Te mando cuarenta besos.Isa

Anónimo dijo...

A lo mejor es que no tienes talento. ¿ lo has pensado?. Mientras tengas amigos que te achuchen, el engaño seguirá vivo. Y es verdad, no paras de quejarte de todo, y creo que lo seguirás haciendo por los siglos de los siglos. La verdad es que no sé ni porqué escribo esto, no te mereces ni un renglón. Mientras te sigas creyendo que el mundo te ha tratado mal, que nadie entiende tu gran arte, que vales más de lo que no demuestras, seguirás dale que dale a la mediocridad. THE GOOD WIFE.

Anónimo dijo...

Yo no me creo nada. Está claro que no me conoces nada, pero nada de nada ¿Donde me quejo en este artículo? A ver...en fin, me da igual ¿sabes? No eres quien para juzgarme y es muy fácil hablar sin saber por todo lo que he pasado y paso. Y no te preocupes, que no pienso borrar tu comentario ANÓNIMO
La gente que me conoce algo, aunque sea un poco, dice todo lo contario, que no me valoro nada, fíjate,lo contrario que tú.

lola dijo...

Y otra cosa. No sé como te haces llamar Good wife con ese comentario lleno de pus y de bilis. Mira, a lo mejor tienes razón, no tengo talento, pero sé hacer mi trabajo, he luchado mucho, y sigo...y no aspiro a nada más que vivir de lo que sé hacer. Con talento o sin él, tengo oficio ¿sabes? y tampoco sé porqué le contesto a un anónimo cobarde. A una persona que no tiene si quiera las agallas para firmar con su nombre y apellidos. Yo al menos, sin talento, no me escondo, como tú.