sábado, junio 20, 2009

Regina



Elis
Tan joven.
Tan regina.
Tan artista.
Elis
se fue,
perdida en
un mar
de anfetaminas.
Elis, quien
sabe, perdida
de amor.
Louca por
voçe.
Desnuda
de esperanza.
O harta de
vivir.
Con 36.
Delirio
Regina.
Reina de la
Bossa.
Quedó tu
instrumento.
Vampirizamos
tu encanto.
Y te marchaste.
Te marchaste.
La sensibilidad,
mata.
No el alcohol
o los barbitúricos,
o el tabaco.
Regina, o Reina.
Hoy tendrías 64,
quizá serías abuela
feliz.
Vieja gloria.
Sin embargo,
eres gloria eterna.
Salve, Regina.
Los que van a morir
hoy, o dentro
de veinte años,
se acunan en
en el prodigio de
tus cuerdas vocales.
Y te saludan.
Y te veneran.

1 comentario:

Mayo dijo...

Me gusta.
La triste vida de una gran artista resumida en pocas palabras.
Con Elis Regina descubrí la calidez de la música brasileña.
Un abrazo.