"El gitano" se había dejado la uña del dedo meñique larga para poder esnifar coca. Las cosas le iban tan rematadamente bien que hasta se metió en eso de la cultura y se fue a “nuyol” pagando una pasta a la fundación de Gabarrón. Hoy ha vuelto a sus cabras. Lo del trampolín no ha funcionado. Ya no hay dinero para juergas, ni para putas. De la riqueza nada queda, salvo clientes que metieron su dinero en un huerto de miseria y que juegan a la ruleta rusa con "el gitano", pistola en mano “que te mato, leche, que te mato” ¿Donde habrá metido las perras "el gitano"? Las putas, ellas han sabido invertir. O quizá se lo gastaron todo en bragas.Su amigo “El gordo”, ese que se comía siete patas de cabrito de una sentada, mira la vida pasar, hecho un "ni, ni". Moraleja: el dinero rápido es humo tóxico pero sus vapores lo contaminan todo. Incluida la cultura, incluida la política. Esperemos que esta Murcia sin dinero quite la venda a más de uno en la región de las apariencias.
Publicado hoy en 20 minutos, Murcia
lunes, marzo 01, 2010
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4 comentarios:
La región de las apariencias... Bueno, cuanto más al sur de la región, más se "tira" del concepto apariencias. Y en la capi y alrededores ni te cuento.
Un inmigrante.
Muy Bueno Lola, pero que muy bueno!!!
¡Excelente texto Lola!
la uña larga del meñique es un signo de distinción. Lástima que todo lo bueno se pierda.
Con dos cojones y sin pelos en la lengua, ¡esa es mi Lola!
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